Colaboradores de Michael Jackson describen caótica escena en casa del artista
Colaboradores de Michael Jackson describieron el jueves en el juicio a Conrad Murray, médico de la estrella, una caótica escena en la que el doctor ordenó a un guardia que sacara equipo médico de la habitación de su jefe, a quien daba masajes cardiopulmonares con una mano.
Fiscal de distrito adjunto David Walgren sujeta una botella de propofol mientras interroga a Alberto Alvarez, uno de los guardaespaldas de Michael Jakcson, durante el juicio contra Conrad Murray, médico del cantante bajo cargos de homicidio involuntario, en la Corte Superior de Los Angeles, el 29 de septiembre. Jackson muriò el 25 de junio de 2009 por una sobredosis de prpofol.
Alberto Álvarez, director de logística de Jackson, dijo que Murray le pidió que le ayudara a sacar unas ampollas y una bolsa de suero que contenía una "sustancia de color blanco lechoso", colocada en un dosificador por goteo para vía intravenosa junto a la cama de la estrella.
El sedante Propofol, que causó la muerte por intoxicación de Jackson, tiene un color blanquecino que llevó al cantante a referirse a él como "mi leche".
Cuando Álvarez entró a la habitación de Jackson el día de su muerte, el 25 de junio de 2009, porque Murray había alertado que el cantante había tenido "una mala reacción", vio al artista "echado en su cama con sus manos extendidas, los ojos ligeramente abiertos y la boca abierta".
Murray le estaba dando masajes cardiopulmonares "usando una sola mano", la izquierda, dijo Álvarez en la Corte Superior de Los Ángeles.
Detrás de él llegaron dos de los tres hijos de la estrella, Paris y Prince. "Paris gritó '¡Papi!'. Estaba llorando", narró Álvarez en un emotivo momento en el juicio, que podría durar cinco semanas y enviar a Murray a la cárcel por un máximo de cuatro años si es hallado culpable de homicidio involuntario.
El asistente narró que sacó a los niños del cuarto y, al volver, el doctor "cogió un puñado de ampollas (...) y dijo: 'Aquí, pon éstas en una bolsa".
Luego, el médico le pidió que retirara una bolsa marrón de suero, que tenía restos de una solución lechosa en el borde. Al tomarla, Álvarez pudo "percibir que había una botella" adentro, que luego identificó como un frasco de 100 mg de Propofol.
"Pensé que estábamos empacando para ir al hospital", dijo Álvarez y cruzó su mirada con el doctor, sentado frente a él.
La fiscalía acusa al médico de "grave negligencia" y lo responsabiliza de la muerte de Jackson por una intoxicación de Propofol, un poderoso sedante que el artista usaba para dormir. La defensa alega que el cantante era adicto a los fármacos y que se administró a sí mismo la sobredosis.
El tribunal escuchó la grabación de la llamada que hizo Álvarez a la emergencia cuando pidió una ambulancia, por orden de Murray.
"No está respirando", dijo al operador. "No está consciente, está en la cama, no responde a nada".
El abogado de Murray, Edward Chernoff, puso en duda que Álvarez haya podido realizar todas las acciones que dijo que hizo antes de llamar a la emergencia, como sacar a Prince del cuarto y recoger las ampollas. "Soy muy eficiente, señor", respondió el testigo.
Otra testigo en la tercera jornada del juicio fue Kai Chase, la chef personal de Michael Jackson, quien narró que esa mañana vio "a Murray bajar las escaleras hasta la cocina, en pánico y frenético".
Cuando la fiscal Deborah Brazil pidió que detallara el comportamiento de Murray, respondió: "Su energía era muy nerviosa, frenética, y gritaba 'busca ayuda, llama a la seguridad, busca a Prince'," el hijo mayor de Jackson, que entonces tenía 12 años.
"¿En algún momento te pidió que llamara al 911?", preguntó la abogada. "No", respondió la cocinera.
Cuando tocó el turno de la defensa, el abogado Michael Flanagan cuestionó: "O sea que viste a Murray frenético, con los ojos muy abiertos, gritando (...) Supiste que algo andaba muy mal, ¿y fuiste a buscar a un niño de 12 años?"
"Hice lo que me ordenaron", respondió Chase.
En el receso de la mañana, cuando Murray salía del tribunal, un par de personas lo increparon -en murmullos, para no alertar a los guardias de seguridad de la corte- acusándolo de "asesino".
Una fan de Jackson dijo a la AFP: "Si alguien trata de curar el mundo y difundir amor, luz, libertad, verdad (...) a esa persona la matan. Por eso mataron a Jesús, por eso mataron a John Lennon y por eso mataron a Michael Jackson", dijo a AFP Irina, una rusa desempleada de 32 años que estaba en el tribunal.
Parte del clan Jackson estaba en la sala, entre ellos los padres, Katherine y Joe, con sus hijos La Toya, Janet y Randy.
Si bien el juez no permite la publicación del programa de testigos que comparecerán, hasta ahora el orden en que han sido llamados a sala ha coincidido con el de las audiencias preliminares, por lo que se podría esperar para el viernes el testimonio de los paramédicos.